domingo, enero 06, 2008

Los reyes magos

Los reyes magos

Permalink 05.01.08 @ 23:58:00. Archivado en Europa, Las Américas, Sociogenética, Pro amicitia universale, Religiones

La Epifanía, voz griega que significa "manifestación", es popularmente el día de los Reyes Magos.

En esta fiesta, más antigua que la misma Navidad, se celebra simbólicamente el hecho de que el Señor no reservara su revelación a un solo pueblo de la tierra, sino que se manisfestara a todos los humanos, representados de forma plural por las personas de los magos, que eran prototipos de los pueblos que los israelitas consideraban como paganos.

Los orientales llamaban magos a sus doctores; en lengua persa, la palabra mago significa "sacerdote". Más tarde, la tradición ha dado a estos personajes los nombres de Melchor, Gaspar y Baltasar y el título de reyes. Con este título se buscaba destacar la solemnidad del episodio y con el número de tres el simbolismo de los dones que, en sí mismos, no son regalos rimbombantes como el comercio actual los representa, sino sencillos símbolos convencionales, comprensibles para los lectores de la época.

Al llegar los magos a Jerusalén, éstos preguntaron en la corte el paradero del “Rey de los judíos”. Los maestros de la ley supieron informarles que el Mesías del Señor debía nacer en Belén, la pequeña ciudad natal de David; sin embargo fueron incapaces de ir a adorarlo junto con los extranjeros. Los magos, una vez llegados al lugar donde estaban el niño con María su madre, le ofrecieron oro, incienso y mirra, sustancias preciosas en las que la tradición ha querido ver el reconocimiento implícito de la realeza mesiánica de Cristo (oro), de su divinidad (incienso) y de su humanidad (mirra).

-oOo-

El roscón de Reyes y los padrinos

Dedico esta nota a mi ahijada Fabienne, cuya divisa ha sido siempre el compartir.

La tradición del roscón de Reyes está ligada a la fiesta de los Reyes Magos. Esta tradición, eminentemente solidaria, reúne a la familia y a los amigos, para cortar el roscón de Reyes y compartirlo. En España se comparte el roscón como postre típico de la comida del día de Reyes, mientras que la fórmula preferida en Hispanoamérica, donde se le llama con frecuencia Rosca, siguiendo la tradición del virreinato de México, es la entrañable merienda del seis de enero. Al parecer, esta costumbre la tomaron las familias cristianas de los romanos, incluyéndola en la celebración de la Epifanía, que recuerda la revelación de Jesús a los Reyes Magos.

La celebración cobró fuerza durante la Edad Media y llegó a México en los primeros años del virreinato, donde, fundiéndose la deliciosa bebida indígena con el sabroso pastel español, se acompañó la rosca de reyes con el chocolate.

Tanto el roscón como la rosca se caracterizan por su forma redonda; sin embargo, en México, posiblemente porque cada vez eran más los invitados a compartir la merienda, la rosca de reyes fue adquiriendo poco a poco una forma ovalada, con el fin de que fuera más grande y alcanzara para todos los asistentes.

No sabemos a partir de qué época se comenzó a esconder dentro del roscón y luego de la rosca un niño dios de porcelana, pero lo que sí sabemos, por la tradición mexicana, es que quien encontraba al niño dios en su trozo de rosca, automáticamente se convertía en el Padrino del mismo. Una de las obligaciones de este Padrino, cuya función simbólica de representante del espíritu solidario de la familia parece evidente, era llevar al niño dios del “Nacimiento familiar” de la casa en donde se cortó la rosca, para ser bendecido en la iglesia más cercana, el dos de febrero, día de la Candelaria.

-oOo-

Recojo aquí mis dos artículos del 04.01.06, que publiqué inicialmente para el periódico Qué!

No hay comentarios: