S. Royal dialogará con F. Bayrou
26.04.07 @ 19:58:00. Archivado en Europa, Pro justitia et libertate
El debate propuesto por Ségolène Royal a François Bayrou tendrá lugar el sábado que viene sobre las cadenas del grupo Canal+.
Juan-Louis Bianco, codirector de campaña de la candidata socialista, ha hecho este anuncio hoy jueves, declarando en la prensa del "Quartier Général" de campaña de Ségolène Royal: “Hay un acuerdo con las cadenas de televisión y el candidato centrista”.
Este encuentro de una hora se retransmitirá en directo y sin codificador, para que sea visible por todos los televidentes que lo deseen, a partir de las 11 h. 00 sobre Canal+ y su cadena de información continua "I-Televisión". El debate deberá ser animado por dos moderadores, incluido Michel Denisot, el presentador del Gran Diario. Se aplicarán las normas de igualdad de tiempo de palabra.
Marielle de Sarnez, la exdirectora de campaña de François Bayrou, organizó este encuentro por teléfono con el PS y Canal +. La intención de Ségolène Royal es que sirva para clarificar los puntos de convergencia y divergencia entre socialistas y centristas, con el fin de informar a los siete millones de electores que votaron por el candidato centrista el domingo pasado y que François Bayrou ha declarado libres de decidir por quién votarán en la segunda vuelta.
Nicolas Sarkozy, candidato del UMP a la elección presidencial, anunció ayer que no quería discutir con el centrista François Bayrou. Aplicando un razonamiento propio del mundo deportivo, Nicolas Sarkozy considera que solamente los dos finalistas que se encuentran en la segunda vuelta deben discutir ante la opinión pública y que no tiene por qué admitir que quien ya había quedado fuera de combate participe ahora en la final, que ha de jugarse exclusivamente entre la señora Ségolène Royal y él mismo. Aparentemente no excluye el diálogo con Bayrou, sin embargo parece claro que no desea que este diálogo sea público. En buena lógica esto significa que Nicolas Sarkozy cree poder convencer a François Bayrou de algo, que se mantendría secreto entre ellos dos, sin que le preocupe el deseo normal de casi siete millones de electores que desearían poder votar en conciencia, a partir de argumentos electorales serios.
Es bastante probable que François Bayrou no admita la manera de proceder de Nicolas Sarkozy.
De Sarkozy dijo el domingo pasado que "tiene connivencias con poderes económicos y periodísticos y agravará la separación entre los franceses", mientras que de Royal criticó que "proponga al Estado como único factor para resolver los problemas".
Sobre su propia actitud, para la segunda vuelta del 6 de mayo, explicó que "todavía no sabía lo que haría", porque las dos opciones en liza "presentan inconvenientes".
Criticó sin ambages que Sarkozy "tenga gusto por la intimidación y que pueda y quiera concentrar el poder como nadie antes", aparte de que ve un riesgo "en su manera de ejercer el poder", que de toda evidencia incluye "el control de la prensa".
En la actitud y en el programa de Ségolène Royal (Pacto presidencial) ve claramente que está muy atenta a cuestiones fundamentales como la mejora de la democracia y la reconstrucción del tejido social, pero teme que su programa electoral sea negativo porque, según él, pone en peligro el "equilibrio" necesario entre los niveles político, económico y social.
El político centrista admitió que ha recibido varias llamadas tanto del candidato conservador como de la socialista, pero que se ha negado a responderlas.
"No practico el mercadeo" político, afirmó Bayrou, antes de añadir que podría cambiar de idea sobre su voto después de ver el debate televisivo que el 2 de mayo mantendrán ambos candidatos y en función de lo que propongan a los franceses.
No obstante, dejó claro que "no aceptará sumisión" a uno de los grandes partidos, que "no van a reparar la situación y se corre el riesgo de agravarla" y apuntó que es "absolutamente imposible" que pudiera aceptar un puesto en el próximo Gobierno.
Bayrou anunció la creación de una nueva formación de centro que se presentará a las elecciones legislativas de junio y añadió que una de las conclusiones de la primera vuelta de las presidenciales es que en Francia "ya hay tres fuerzas, no sólo dos", lo que constituye "una inmensa esperanza".
Esa formación podría llamarse Partido Democrático, si los militantes de la actual fuerza centrista, la UDF, aceptan su propuesta.
Bayrou, que ha pasado del 6,8 por ciento de voto en 2002 al 18,5 del domingo, pintó un panorama sombrío de la situación en Francia, caracterizado por "una democracia enferma, un tejido social roto y la falta de crecimiento".
En este contexto, señaló que su nuevo partido debe servir de "contrapeso" a los dos grandes y confirmó que será candidato en las elecciones legislativas de junio.
La Vanguardia.es